sábado, 10 de julio de 2010

Reconstrucción, Roma y Otra Transalpina


Después de la frustración por no haber podido terminar el Maratón Alpino de Madrid, las secuelas físicas en forma de dolores insoportables en las rodillas y las sicológicas en forma de tristeza de corredor que arrastro desde entonces , solo quedaba una cosa, mirar hacia dentro y reconstruir todo desde el principio otra vez. Así funciona esto, caes y te vuelves a levantar siguiendo un camino natural hasta el fin que espero que esté todavía muy lejos.

La reconstrucción es en primer lugar sicológica, al principio uno no entiende la razón por la que de repente falla el cuerpo cuando mejor crees que estás. He leído pequeño libro que me han regalado mis padres por mi 45 cumpleaños, es de un escritor Japones, Haruki Murakami,se lo que recomiendo a todo el mundo, incluso si no eres corredor. El escritor hace un símil con el cartero que trae una mala noticia (la lesión) y dice que la jefa del cartero no es ni más ni menos que la REALIDAD, esta es la causa que estaba buscando para explicarme a mí mismo lo que me ha pasado, la Realidad es que correr al ritmo que corrí los primero 25 km fue una locura, mis músculos y mi corazón se encontraban muy bien y junto con mi cabeza de naturaleza explosiva, hicimos un equipo para destrozar ligamentos, tendones y articulaciones.
La REALIDAD siempre te pone en su sitio, tarde o temprano te envía al Cartero para darte noticias, pero no siempre tienen que ser malas. Hasta ahora he tenido muchas buenas, el cartero ha venido muchas veces para decirme que puedo correr más rápido, que ya no necesito comer tanto, que tengo mucha energía constante durante todo el día, que hay otras metas sencillas como correr 15 km sin el mínimo esfuerzo que producen mucha satisfacción, etc …. Voy a quedarme con que el balance entre buenas y malas es positivo. De esta forma creo que he superado la parte sicológica mi frustración. MENSAJE RECIBIDO REALIDAD.

La parte física es un poco más complicada, he tenido que dejar de correr durante dos semanas (casi). Para no perder la buena forma en la que me encuentro he usado mucho la elíptica y la bicicleta de gimnasio. También he cuidado al máximo mi alimentación para mantener mis actuales 71 kg. Tanto en la elíptica como en la bicicleta no he sentido ningún dolor y he podido poco a poco recuperar la confianza en mis rodillas.

ROMA

Cuando digo que casi no he corrido significa que solo un día no he podido resistir la tentación y he salido a correr, pero la ocasión era como para no perdérsela. He estado pasando unos días de vacaciones con mi familia en Cerdeña y como pasamos dos día en Roma, no podía pasar sin visitar la Ciudad Eterna como corresponde a un runner, corriendo. Ha sido una experiencia que se me quedará grabada para siempre.

Me levanté a las 5h30 me di una ducha para tonificar el cuerpo, me vestí para la ocasión y baje al vestíbulo del hotel para memorizar con un mapa el recorrido que quería hacer; si veis la cara del recepcionista cuando le pedí el mapa …. Fue muy gracioso, el buen hombre me dijo que a esa hora si quería un taxi tardaría el llegar unos 30 minutos y que el desayuno empezaba a las 7h,creo que era una forma educada de decirme que mi despertador había fallado y que haría mejor en subir a dormir otro ratito, claro que mi respuesta le debió dejar pensativo un rato. Le dije que el taxi eran mis piernas y que ese día me tocaba correr en ayunas. El caso es que me dio el mapa, lo memoricé más o menos, estiré un poco y salí corriendo.


En Roma a las 6h ya hay mucha luz en esta época, es como en Madrid a las 8h pero sin nadie en la calle. Primera etapa Plaza de San Pedro (4,5Km), una vuelta corriendo a la plaza, un momento de recogimiento por todo lo que representa, un agradecimiento y unas peticiones sencillas pero importantes que seguro que me conceden, en la plaza solo estábamos tres y creo que en consecuencia nos darán alguna prioridad. Segunda etapa Castello Sant Angelo (5,8Km), después sigo el curso del Tiber hasta el Circo Máximo (8,5 Km) donde me doy una vuelta a lo Roky Balboa y curiosamente me cruzo con una chica que también estaba corriendo, me dice la frase mágica “siamo gli unici” a lo que respondo con mi acento francés “di verità che noi siamo” desde allí al Coliseo (10Km), dos vueltas y tocar la puerta de Gladiadores y también aquí un poco de recogimiento y un pensamiento para los bravos luchadores que aquí dejaron su vida. Foro Romano (11Km). Arco de Trajano (12 Km) y regreso callejeando desde la plaza de la República, me pierdo a consciencia por las calles de Roma, corro sin rumbo durante una rato saboreando la carrera por la ciudad como un buen vino, paso por Plaza Navona hasta que encuentro otra vez el Tiber y regreso al Hotel. Total 21 Km, un dolor de rodillas brutal y unas bonitas sensaciones e imágenes que ya no me quita nadie.

Hoy he corrido por fin otra vez en mis caminos de Castilla, con un calor seco reconfortante y con mejores sensaciones en mis rodillas y articulaciones en general. Total 25 Km en ayunas. Ya se acerca el día, solo quedan 55 días para empezar la Transalpina y queda mucho por hacer si no queremos que la REALIDAD nos envíe al Cartero con malas noticias y si así fuera habrá que seguir intentándolo como parte del ciclo de la vida.

Ya estamos otra vez aquí. Vamoooossss