Etapa 4. 43 Km. Neukirchen am Großvenediger/A – Prettau im Ahrntal/I

La importancia de tener un compañero como Daniel y saber sufrir.

Aunque luego desarrollaré esta idea con detalle, lo primero que quiero hacer es daros las gracias por vuestros comentarios. Todos los días antes de irnos a dormir, los leemos y nos hacéis pasar un buen rato. Aunque en unos días colgaremos fotos más bonitas, hemos conseguido hoy una de la organización, se nos ve de espalda, pero creo que se nos distingue.

Como os comenté ayer, detrás de la puerta me pareció ver a ese señor tan desagradable y de nombre cansancio, pero también había cierta esperanza en recuperar los puestos perdidos en la clasificación. Pues bien, algunas veces todo puede ser a la vez.

Nos hemos puesto en marcha a las 5h para preparar todo y tomar la salida a las 7h, nos esperaban 43 km (un maratón con propina) y me preguntaba como se corre un maratón después de haber corrido 47km el día anterior... Desde que me he levantado, tenía claro que estaba justo de fuerzas, ese dolor característico en los músculos, no indicaba nada bueno. Desde luego a la señora Esperanza no la esperaba a primera hora. Dani, con su flema británica me miraba como diciendo: “Ya te lo decía yo, es que vas como loco”, él cada día está mejor y yo no recupero ya tan bien.

Hemos salido y primero teníamos 11 km para correr rápido, pero mis piernas no tenían potencia y solo me concentraba en no perder el ritmo de Dani, luego una subida brutal por unas cataratas preciosas, le he dicho a Dani que tirase y me dejase sufrir en paz, me he pasado 3 km buscando el ritmo y luego 8 km en coger a Dani. Me he colocado detrás de él y me ha llevado otros 5 km marcándome el ritmo y no dejándome caer, eso es tener un buen compañero. Luego una subida hasta el infinito, hemos corrido por nieve, con ventisca y algo de niebla, finalmente hemos bajado casi esquiando y con un frío terrible, una familia había preparado en la puerta de su casa en la montaña té caliente y nos lo ofrecían a todos, no eran de la organización, lo hacían con sus hijos, casi me pongo de rodillas para darles las gracias y desde ahora tomaré té siempre que pueda. Hoy muchos equipos han reventado, entre la etapa de ayer y la dureza de la de hoy, las lesiones y el agotamiento han dejado fuera a 22 equipos. Nosotros hemos terminado en el puesto 20 y la señora Esperanza nos ha visitado dejándonos en el 19 de la general, los últimos 10 km han sido muy rápidos y me he encontrado mejor que a primera hora . Mañana otra vez salida en los puestos de honor, veremos si podemos mantenernos o mejorar algo, es muy difícil, el nivel es muy alto y las fuerzas escasas, pero cada vez queda menos y desde hoy mi cuerpo es un misterio para mi, llevo toda la tarde cuidándome en el estupendo hotel donde estamos y en dos días veré a mi familia en las dos últimas etapas esto me tiene que dar fuerzas, hay que seguir luchando y me tranquiliza ver que Dani está como un toro. Todo depende de mi.

Mañana son solo 29 km aunque subimos hasta 2.600m alto y está previsto lluvia y nieve desde los 1.500m, será otro día complicado, de concentración máxima para no hacernos daño.

Ahora a dormir que ya ya es tarde.

Vamooosssss.

PD. Javier ya me he arrancado las uñas que estaban fastidiando, no duele demasiado. Es solo un momento, dejas de ver durante un segundo, un alarido y luego ya está, un poco de mercromina y esparadrapo, si se infecta se corta el dedo y continuas.